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    Vischi dilató la declaración de la ex pareja de Hornos para no frenar la sentencia contra Cristina

    La víctima había realizado dos pedidos de audiencia testimonial, después de denunciar al camarista por abuso. Presiones empresarias y una pelea entre Borinsky y el acusado.

    El senador Eduardo Vischi logró dilatar la fecha de citación a audiencia testimonial para la ex pareja del camarista Gustavo Hornos, uno de los miembros del tribunal que divulgará el fallo contra Cristina Kirchner en la causa Vialidad el próximo 13 de noviembre.

    Durante la reunión de la Comisión de Acusación del Consejo de la Magistratura, el legislador radical impulsó este miércoles el reclamo de la actualización de la información sobre el expediente, abierto tras una denuncia por abuso contra el magistrado por parte de la mujer, tal como publicó LPO.

     

    Con el apoyo del titular de ese cuerpo, el abogado Miguel Piedecasas, Vischi planteó que «hay otros escritos en la causa que no fueron remitidos». «Estamos pidiendo una actualización de la información de la causa para tratar de tener todo el material del expediente y poder leer con tiempo para seguir avanzando en las pruebas», se excusó.

     

    Desde el entorno de Piedecasas, argumentaron ante LPO que se trató de «una definición que toma el consejero informante (por Vischi) y normalmente la comisión acepta porque es consejero instructor». «Lo que decidió hoy es que se va a recibir toda la información documental, la ampliación que se ha pedido y luego se fijará una fecha, si lo pide el consejero informante», completaron.

     

    Los diputados Rodolfo Tailhade y Vanesa Siley, consejeros en representación del peronismo, pelearon para que la citación fuese cuanto antes, atravesados también por la premura que les impone la lectura de la sentencia en segunda instancia contra la ex Presidenta para el próximo miércoles.

    Aunque desde la bancada de UP disimulaban la frustración alegando que conocían la improbabilidad de que se lograra una audiencia testimonial que manchara a Hornos antes de la posible ratificación de la condena contra Cristina, en los pasillos de Comodoro Py comentaron a LPO que hubo un intento del kirchnerismo por sacarlo de la cancha a Hornos.

     

    De hecho, LPO informó que la defensa de Cristina buscó la recusación del magistrado, integrante de la sala que tiene su causa en Casación junto a sus pares Mariano Borinsky y Diego Barroetaveña. Sin embargo, los magistrados rechazaron de plano el recurso.

     

    Por eso, la aprobación del pedido de ampliación de información fue considerado como una victoria a medias por el peronismo. El expediente votado planteaba «oficiar al Juzgado Civil N° 12 y al Juzgado Federal en lo Criminal y Correccional Nº 8, a cargo de Paula Marinkovich y Sebastian Ramos, a fin de que remitan las actualizaciones de los expedientes contra el juez de Casación Penal, Dr. Gustavo Hornos», al tiempo que exigía que «se cite a la víctima una vez sean remitidas estas actuaciones».

     

    Siley, por su parte, enfatizó que la víctima pidió esa audiencia «dos veces», el 22 de octubre y el 30 de octubre. «Las autoridades tendrían que haber hecho rápidamente lugar a esa petición», expresó durante su intervención en la comisión, y recordó que esta denuncia, tal como informó LPO, «se inició por la Cámara de Casación casi de manera unánime». El único magistrado que manifestó su disidencia fue Carlos Mahiques.

     

    El revuelo en la Magistratura levanta polvareda también en la Casación. Fuentes judiciales refirieron a LPO que, durante la firma de un convenio entre el máximo tribunal del país y el Museo del Holocausto, Hornos le habría reprochado a Borinsky la agitación de la denuncia de su ex pareja. Si bien la excusa de la ceremonia era la celebración del año nuevo judío con la rúbrica de un acuerdo para fortalecer la lucha contra el antisemitismo, algunos testigos se habrían sorprendido por la bronca entre ambos, cuyos lazos de amistad se remontan muchos años atrás.

    Además de los protagonistas de la discusión, estaban presentes el titular del museo, el empresario Marcelo Mindlin, y los camaristas Daniel Petrone, Mahiques y Barroetaveña. También participaron los fiscales generales ante la Cámara, Mario Alberto Villar y Javier De Luca, y los jueces federales, Ricardo Basilico, Jorge Gorini, Eduardo Farah y María Eugenia Capuchetti.

     

    Según confiaron a LPO en un juzgado, Borinsky habría referido la historia de la víctima con su colega ante una visita de referentes kirchneristas a su despacho, meses antes que estallara el escándalo. «Lo visitaron en su oficina y se escuchaban los ruidos de la mina, que estaba pateando las puertas, y Borinsky lo mandó en cana a Hornos», dijeron.

     

    Allegados a Borinsky negaron cualquier incidente y evitaron responder preguntas, en tanto el juez se encuentra ultimando detalles de su voto. Pero la imagen del encuentro entre el juez y emisarios de Cristina sugiere que había vasos comunicantes con el presidente de la Casación, cuyo nombre también sonaba para ocupar la Procuración General de la Nación. Para ese cargo, ocupado desde hace 8 años de forma interina por Eduardo Casal, cualquier postulante necesita dos tercios de los votos del Senado, donde el peronismo cuenta con 33 bancas sobre 72.

     

    De hecho, un diputado aliado al oficialismo y uno opositor comentaron ante LPO la versión sobre la consulta de Borinsky con un importante empresario de medios, a quien le habría revelado que votaría en el fallo de la Causa Vialidad por la absolución de Cristina porque la condena estaba garantizada con el voto de Barroetaveña y Hornos. Su jugada apuntaba a ganarse el favor del kirchnerismo para alcanzar el lugar de Casal pero su interlocutor lo emplazó de forma muy poco amable a ratificar la sentencia de primera instancia.

     

    La anécdota pinta a los protagonistas como actores casi improvisados o inexpertos, ángulo utilizado por un peronista para advertir que la suerte de Cristina evidencia que no hay operadores judiciales de su espacio con algún grado de efectividad. No obstante, un magistrado concedió que «el nivel de presión política para empujar la denuncia contra Hornos era alto pero también la presión empresaria en Vialidad».

     

    Tal vez lo más inquietante sea el rumor sobre la llegada de audios de la ex pareja del camarista al Consejo de la Magistratura. La mujer revelaría en esas piezas secretos mal guardados sobre aventuras del juez con dirigentes políticos que llegaron muy lejos.

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